Mindfulness & Compasión | Juan Bezos
El contexto terapéutico con el que trabajo está enmarcado en las denominadas terapias de tercera generación, Terapia Metacognitiva, Terapia Transpersonal, Terapia contemplativa (basada en Mindfulness), Terapia Conductual Dialéctica, Terapia de Aceptación y Compromiso y DBM (metodología de modelado del comportamiento)
Hay una tendencia en mi trabajo a centrarme en la naturaleza de los barruntamientos, cavilaciones, rumiaciones, preocupaciones, evitaciones y en menor medida de la historia vital de la persona. En mi enfoque de trabajo, basado científicamente y demostrado empíricamente, no es tan importante el contenido de la mente, sino cómo nos relacionamos con él y de ahí como condiciona nuestro vivir y el de los demás.
Hay una gran curiosidad por como ocurre lo que ocurre. La curiosidad es un elemento fundamental dentro del contexto terapéutico con el cual trabajo. Son muchas las ocasiones en las que nos encontramos inmersos en nuestros pensamientos y emociones, sobre lo que nos ocurre, pero muy pocas en acercarnos al cómo está ocurriendo y que estamos haciendo para que ese estado se mantenga. La curiosidad nos acerca a esos procesos.
Es importante desarrollar una comprensión mayor de qué es lo que nos ocurre, esto no solo se basa en acercarse a nuestros contenidos mentales, que también, sino en adentrarse en cómo vamos construyendo nuestro mundo interno y externo, nos dota de cierta capacidad para responsabilizarnos de nuestra vida y darnos la oportunidad de tener experiencias mayores de bienestar y felicidad.
Llegar a comprender la naturaleza, fuentes, factores de mantenimiento y factores de alivio es una prioridad para ir más allá de la situación en la que nos encontramos. La función de nuestras emociones, comportamientos y pensamientos encierran la llave de la comprensión de lo que nos ocurre. Dar luz a estas funciones, nos permitirá poder activar nuestros sistemas de autoregulación y autogestión sobre nuestros procesos internos y con ellos dirigirnos y enfocarnos en lo que es realmente importante para nosotros.
El marco compasivo, entendiendo la compasión como una actitud ante la vida y sobre todo una actitud de relación conmigo mismo, conmigo misma y con los demás, es algo que acompaña todo el proceso. Convertirnos en nuestros mejores amigos, crear un marco de relación con uno mismo, una misma basada en el amor, comprensión, aceptación y compromiso es el pilar que nos permite sostener todo aquello que acontece en nuestras vidas.
Nunca estamos solos, por muy duras que sean las circunstancias o condiciones en las que nos podamos encontrar, siempre nos encontraremos acompañados, acompañadas, por nosotros y nosotras mismas, esto es una ley fundamental y universal.